
Hoy amanecí cansada de Ti
Hoy desperté sedienta de Mí
Tuve que recoger mis despojos
Y sanear las heridas;
Me pedí perdón y al espejo me ví.
Más ojerosa, un poco desaliñada
Con la mirada perdida,
unos kilos de más por la depresión
Pero Viva.
Hoy después de tanto y tanto tiempo
Me parece que haber llorado no bastó.
Me necesito aún mas
de lo que creí que te podía necesitar
La primavera ha dado señales de vida
El invierno poco a poco va cediendo
su frío y sus ramas secas por
una nueva vida que:
merece ser vivida.
2 comentarios:
hermozo post.
haga caso de Antonia... no se quede mucho sobre esa roca.
un abrazo
Que el mar solo se lleve aquello que te daña y traiga en su ola lo mejor que te mereces.
Vivir, magnifico regalo, no hay que desperdiciarlo1
Besos con el alma :)
Publicar un comentario